A la hora de hablar del problema de la brecha digital en España, se insiste mucho en la idea de que tenemos una oportunidad de oro para "no dejar a nadie atrás" en el proceso de digitalización en el que el país anda inmerso en la actualidad. Ni siquiera en el pico más ventoso de Aralar.
En la vertiente guipuzcoana de la sierra de Aralar se encuentra la mancomunidad de Enirio-Aralar: más de 3.000 hectáreas de terreno situadas en su mayor parte a más de 1.000 metros de altura donde, superados los hayedos adornados por dólmenes de tiempos remotos, 18.000 ovejas, 900 yeguas y 900 vacas pertenecientes a los ganaderos de los 15 pueblos que conforman la mancomunidad pastan en los meses de verano. Enirio-Aralar, establecida hace 600 años y presidida por el alcalde de Ordizia, pertenece al Parque Natural de Aralar y cuenta con 40 cabañas situadas en zonas remotas -algunas de ellas sin agua ni luz- que se ceden a los pastores para que puedan permanecer junto a sus rebaños y realizar tareas como el ordeñado o la elaboración del queso de Idiazábal.
Para acceder a la cabaña de Kontxi, donde llegado el momento -“cuando no estén secas”- le tocará ordeñar manualmente dos veces al día a sus 200 ovejas, nuestro grupo se desplaza desde Ordizia en el 4x4 del alcalde de Abaltzisketa, Jon Zubizarreta. Es media hora de subida por un camino apenas trazado en la que sólo nos encontramos con la curiosidad de las vacas que pastan plácidamente para olvidar los meses de invierno que han pasado recluidas en los establos.
Tras aparcar junto a una de las cabañas que tienen un acceso más sencillo, toca caminar veinte minutos por las laderas de Aralar, haciendo frente a vientos de 80 kilómetros por hora que dificultan la subida y convierten las gotas de lluvia en alfileres que se clavan en nuestras caras, llegamos a la cabaña de Kontxi, un refugio con cocina de leña y una pequeña habitación donde, según nos comentan, a veces se les ha colado alguna pareja de excursionistas.
La conectividad en la sierra de Aralar apenas existe; y la que existe, viene y va, como el viento racheado. Así que de la digitalización de la actividad en Aralar ya ni hablemos. El resultado es que los pastores de la mancomunidad se ven expuestos así a un aislamiento que puede ser total si un temporal arrecia. Eso por no hablar de que, si ocurre alguna desgracia, estarán a expensas de que alguien se extrañe de su falta de noticias.
Una forma de vida tan exigente como la de Kontxi, que se enfrenta a ella con un ánimo admirable, o la de Jon, que también tiene a sus yeguas un poco más arriba, puede mejorarse gracias al uso de la conectividad por satélite. El Grupo Red Eléctrica, a través de HISPASAT y Elewit, lidera un proyecto piloto en el que trabaja con el integrador de soluciones IoT Nexmachina para implantar en la zona una serie de aplicaciones de conectividad encaminadas a mejorar las condiciones de los pastores en sus cabañas, garantizar su seguridad y optimizar los recursos de los municipios de la zona.
Este piloto, que cuenta también con la ayuda de Hazi, empresa pública dedicada al impulso de la competitividad y sostenibilidad del sector primario y del medio rural y litoral vasco, inició su instalación a finales del mes de junio. En concreto, se han instalado un punto WiFi de conectividad por satélite, así como dispositivos de SOS, cencerros digitales para el ganado, sensores de acceso al interior de la cabaña y de riesgo de incendios tanto en su interior como en las zonas colindantes, de control de acceso a la mancomunidad, de las plazas de parking y de control del alumbrado público en los alrededores de Abaltzisketa -el municipio que cuenta con una mayor porción de terreno de la mancomunidad-, todos ellos conectados vía satélite. Gracias a este piloto, los habitantes de Abaltzisketa y los pastores de Aralar contarán con herramientas que contribuirán de un modo sencillo a mejorar la seguridad y la sostenibilidad del entorno rural y la actividad primaria de la sierra de Aralar. Una solución que es exportable, además, a cualquier punto del territorio nacional por medio de los satélites de HISPASAT y que, gracias, al amplio abanico de soluciones IoT, puede adaptarse a las diferentes necesidades que se demanden en cada caso. Para que así, de verdad, no dejemos a nadie atrás.
HISPASAT presentó en Presura 21 sus soluciones de conectividad para el mundo rural, incluido su nuevo servicio mayorista de banda ancha por satélite de hasta 100 Mbps.
El proyecto piloto Smart Boat de Redeia y Nexmachina ha desplegado sensores IoT en una embarcación de Hondarribia para controlar la seguridad de su tripulación y mejorar su actividad pesquera.
Nos unimos a Fundación Repsol para aportar soluciones vía satélite al mayor proyecto de este tipo en España.
Esta semana se ha celebrado en Bruselas la European Space Conference, uno de los principales encuentros del sector en el continente, donde se debatió acerca de la nueva constelación en cuya definición está trabajando HISPASAT
El proyecto piloto Smart Boat de Redeia y Nexmachina ha desplegado sensores IoT en una embarcación de Hondarribia para controlar la seguridad de su tripulación y mejorar su actividad pesquera.