La unión del satélite y el 5G para impulsar la conectividad del futuro

El desarrollo del 5G, un verdadero cambio de paradigma en las telecomunicaciones,  responde a la creciente necesidad de conectar en todo momento objetos y personas estén donde estén, tanto con otras personas como con otros objetos. Esto permitirá ofrecer al usuario un servicio convergente y unificado, con nuevos casos de uso incluso en sectores caracterizados por un escaso o nulo nivel de digitalización. Para conseguir este objetivo tan ambicioso de forma eficiente, esta nueva tecnología se ha planteado desde su origen como una red de redes que aproveche las ventajas características de cada una de las infraestructuras de telecomunicaciones que tenemos a nuestro alcance, ya sean fijas, terrestres o satelitales.

Esta combinación tendrá que ser un ecosistema ordenado, que se adecúe a los requisitos de cobertura y capacidad de esta nueva tecnología en cada momento y circunstancia. Sólo así se podrá garantizar un desarrollo comercial global y viable de este nuevo estándar.

¿Qué puede aportar el satélite al 5G? Básicamente, un despliegue universal, rápido y eficiente. Como ya está viéndose en diversas soluciones de conectividad de banda ancha en entornos remotos, el satélite es una herramienta clave para poder garantizar al 100% de la población y en el 100% del territorio las tecnologías ligadas a la digitalización. Además, permite optimizar con rapidez y menor coste la extensión de redes celulares, sin dejar a nadie atrás. Fruto de esta convergencia pueden explorarse aplicaciones de Edge Computing 5G vía satélite, que suponen una importante mejora en la experiencia de usuario y un significativo ahorro para el operador, que no tendrá que transmitir de forma continua los datos a la nube.

En el marco de la última European Space Conference, HISPASAT encabezó un workshop dedicado precisamente a analizar el papel que el satélite ha de jugar en el desarrollo de este nuevo estándar. Aquí puedes ver la charla completa, que contó con la participación de representantes de GSOA, Darwin, Nearby, Thales y el Observatorio 5G:

La necesaria colaboración dentro del 3GPP

 Para conseguir este deseado ordenamiento de redes, 3GPP, la asociación global que desarrolla los estándares de las comunicaciones móviles, está trabajando en la estandarización del 5G incluyendo a la tecnología, protocolos y modulaciones del satélite. Esto permitirá la convergencia completa de tecnologías, es decir, la interoperabilidad de redes con el satélite: al igual que un móvil 5G podrá conectarse a cualquier red, también un dispositivo de un usuario satelital podrá interoperar en diferentes redes de forma trasparente para el usuario. Además, mediante esta estandarización el satélite podrá acceder a un rango mayor de proveedores tecnológicos y de desarrollos innovadores compatibles.

Como se comentó en el workshop, es necesario que los operadores, junto con los proveedores y los fabricantes de satélites, trabajen de forma estrecha y generalizada en la estandarización de esta nueva tecnología. Además, es importante que incrementen su presencia en organismos como el 3GPP para dar mayor relevancia al papel que puede jugar el satélite y dotarle así de un protagonismo más necesario que nunca en la toma de decisiones. 

Darwin marca el camino

Otro de los elementos clave a la hora de pensar en el uso del satélite para soluciones 5G es el de la movilidad. En este sentido, los trabajos que Darwin está liderando en el ámbito del vehículo autónomo demuestran cómo el satélite puede complementarse con las redes terrestres para asegurar la calidad y la cobertura universal de forma transparente para los usuarios.